La Fiscal General del Estado, María José Segarra, ha presidido hoy en el salón de plenos de la Audiencia Provincial de Sevilla el acto de toma de posesión del nuevo Fiscal Jefe.
Segarra ha mostrado su confianza en que su sucesor en este cargo tiene garantías de éxito por su capacidad para resolver los problemas, y que se pone al frente de un equipo de setenta fiscales sólido y cohesionado.
La Fiscal General ha abogado por un Ministerio Público cercano al ciudadano, de forma que explique sus decisiones y haga un esfuerzo por comunicar a la sociedad. Ha resaltado que “los fiscales tiene una vocación de atender a las víctimas especialmente vulnerables, a los menores en situación de riesgo o cuando han cometido un delito y a sus  familias,   a los ancianos, a las personas con discapacidad, a aquéllos que se encuentran en prisión, a los extranjeros y extranjeras en riesgo de trata o explotación sexual o laboral”.
Por su parte, Luis Fernández Arévalo ha recordado la frase de Concepción Arenal “odia al delito y compadece al delincuente” para explicar que las condenas de prisión no deben servir sólo como castigo sino para que el recluso vuelva a llevar una vida respetuosa con la ley. Ha mostrado su firme determinación por investigar el fenómeno de la corrupción en estrecha colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Para ello, acudirá al uso de piezas separadas que permitan agilizar las investigaciones y evitar así que las instrucciones judiciales se empantanen.
Al acto han acudido numerosos fiscales y jueces, la Fiscal Superior de Andalucía, Ana Tárrago, el alcalde de la ciudad, Juan Espadas y la consejera de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, entre otras autoridades.

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