El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha participado en el curso de la Universidad Complutense que se celebra en El Escorial. 

En su intervención, el fiscal general ha expuesto la necesidad de superar el actual modelo inquisitivo actual y cambiarlo por el modelo de fiscal investigador que ya funciona en todos los países de nuestro entorno. Según Maza, el sistema que ideó en 1882 Alonso Martínez ya está caduco y hoy día el juez de instrucción es un cuello de botella en las investigaciones complejas, y esta lentitud es desesperante. 

Cuando en casos de corrupción la Justicia es lenta la sociedad pierde confianza en las instituciones y por eso la lentitud es ya un problema de Estados que hay que resolver.

El Ministerio Fiscal juega un papel importante en esta reforma ya que en el nuevo modelo procesal la investigación será mucho más ágil y rápida, ya que la fiscalía sólo deberá identificar las pruebas y los testigos y presentarlos en la vista oral donde deberá celebrarse el juicio sin reiterar pruebas y declaraciones. En este modelo, el fiscal controlará la actuación de la policía y el juez de garantías tutelara  los derechos de los investigados.

Este drástico cambio, ha afirmado el fiscal general, traerá problemas técnicos como el papel de la defensa en la investigación y también la actuación de la acusación popular , figura que sólo existe en España.

Maza ha recordado que ya existen dos borradores de ley de enjuiciamiento criminal, uno del PP y otro del PSOE, y ambos coinciden en otorgar la investigación penal al fiscal.

Maza ha puesto a Portugal  como modelo de fiscal investigador, aunque también debe acudirse al derecho comparado para conocer otros sistemas.

En opinión del fiscal general el Ministerio Público español goza de una autonomía máxima en su forma de trabajar y ha recordado que desde el año 2007 el fiscal general no puede ser cesado por el gobierno. Maza ha afirmado que el fiscal general debe ser autónomo de todos los poderes, y esto es incompatible con la posibilidad de ser cesado por el Parlamento.

El principio de unidad de actuación que rige la fiscalía garantiza la seguridad jurídica y la aplicación uniforme del derecho, frente al poder difuso de los jueces , un que cada uno de ellos puede aplicar la ley al caso concreto de manera muy diferente.

Por último José Manuel Maza ha añadido que los fiscales en España ya investigan en la jurisdicción de menores y ha recordado que en 2016 las fiscalias practicaron cerca de 16.000 diligencias de investigación.