FISCALES ESPECIALISTAS DE CASTILLA-LA MANCHA, A CORUÑA Y ZAMORA EN EL 8-M

En el Día Internacional de la Mujer, nos acercamos los fiscales especialistas en violencia sobre la mujer para que nos cuenten como desarrollan su trabajo en la protección y atención de las víctimas de violencia de género

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JESÚS GIL. Fiscal delegado de Violencia contra la Mujer en Castilla-La Mancha

1.- Desde que inició tu recorrido como Fiscal Especialistas delegado contra la Violencia de Género, ¿qué es lo que más te ha llamado la atención de esta problemática?

Soy Fiscal Delegado Provincial de Ciudad Real y desde Mayo de 2018 Fiscal Delegado de Castilla La Mancha y coordino esta materia en toda la Comunidad Autónoma que por su gran extensión geográfica necesitaba una figura de este tipo. Lo que más me ha llamado la atención es que no podemos frenar esta lacra social a pesar de todos los esfuerzos que se hacen. 2019 fue un mal año en general con un aumento de asuntos.

2- ¿Qué valoración haces al analizar estos delitos ante un problema que sufren las mujeres por parte de algunos hombres?

Las mujeres necesitan protección y sentirse protegidas frente a sus agresores. Creo que nuestro sistema legal atribuye una protección legal y eficaz de las víctimas. Por eso se denuncia más y las mujeres víctimas dan un paso al frente denunciando a sus agresores.

3.- ¿En qué consiste el trabajo cotidiano en la especialidad de violencia sobre la mujer?

Sobre todo, en buscar una respuesta inmediata y rápida al caso planteado. En esa materia es fundamental el Juicio Rápido (Diligencias Urgentes) para facilitar la protección de esa persona que acaba de iniciar un procedimiento contra su pareja o expareja. Debe sentirse segura y protegida en todo momento una vez que se ha decidido a dar el paso al frente denunciando.

4.- ¿Hay algún patrón común en las victimas y los agresores en el ámbito de tu Comunidad, en comparación con el resto de España?

Desconozco esta información. No llevamos estadísticas de este tipo. Se trata más de una cuestión sociológica que penal.

5.- ¿Cómo crees que mejoraría la atención a las víctimas?

Fomentando más la formación y especialización en la materia. Una formación continua de todo el personal que trabaja día a día con esta materia y una mayor especialización con la creación de Juzgados exclusivos de Violencia contra la Mujer. En Castilla la mancha sólo Albacete cuenta con Juzgado exclusivo.

6.-De los casos que ha llevado en el ejercicio de esta especialidad ¿hay alguno en concreto que quieras destacar?

Quizás los más duros sean los Asesinatos/Homicidios que se celebran por Jurado. El doble Asesinato de Daimiel en 2017 ha sido uno de los que más me ha marcado como profesional. Fueron dos semanas de Juicio ante el Tribunal del Jurado quien condeno al acusado como autor de dos Delitos de Asesinato consumados con Alevosía.

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FERNANDO MARTÍNEZ QUIROGA. Fiscal delegado en A Coruña  

1.- Desde que inició tu recorrido como Fiscal Especialistas delegado contra la Violencia de Género, ¿qué es lo que más te ha llamado la atención de esta problemática?

Durante los más de 11 años que llevo dedicándome a esta materia no deja de sorprenderme el importante número de casos en que la mujer, después de dar el difícil paso de denunciar, reanuda la convivencia con el maltratador. En ocasiones, después de relatar situaciones gravemente atentatorias contra su dignidad e integridad física y psicológica.

Esta idea la traigo para enfatizar lo difícil y peculiar de esta delincuencia. Algo que nadie toleraría, cuando se dan determinadas circunstancias de dominación, sometimiento, anulación de voluntad y dependencia psíquica y económica se “permiten”, suponiendo que la mujer esté en disposición de hacerlo, cuestión que la mayoría de las veces es mucho decir.

Esta realidad nos tiene que motivar para pensar qué podemos hacer para evitar estas situaciones, qué hemos hecho mal, cómo evitarlo.

2.- ¿Qué valoración haces al analizar estos delitos ante un problema que sufren las mujeres por parte de algunos hombres?

La primera reflexión es que estos ilícitos nada tienen que ver con otros contemplados en el Código Penal, sus particulares circunstancias: se comenten en el seno de una relación de pareja, el autor es el que mejor conoce a la víctima, están determinados por las estrechas relaciones y vínculos personales, y sentimientos que determinan la posición de la mujer  a lo largo del procedimiento,  sus eventuales cambios de opinión, la existencia de hijos comunes en muchos de los casos, exige un tratamiento  diferencial  del resto de los delitos.

Ese tratamiento diferencial empezaría por una separación de los órganos judiciales de instrucción y enjuiciamiento, que deberían ubicarse en un lugar distinto al del resto de los órganos judiciales y en el que se integrasen todos los especialistas que intervinieran en ellos. Solo así se lograría el propósito pretendido por la Ley Integral: el tratamiento integral y la especialización.

La segunda reflexión es que estos ilícitos presentan un índice elevado de reincidencia que, en teoría, se pretende minimizar a través de los programas formativos de necesaria realización en los supuestos de suspensión de condena de la pena privativa de libertad. Pero este pretendido logro está lejos de conseguirse, no solo por razón de que la participación en esos cursos formativos tiene una finalidad extrínseca para el penado, lograr la suspensión de la condena, sino, principalmente, porque la realidad judicial actual está determinada por la imposición de la pena de trabajos en beneficio de la comunidad en la mayor parte de estos ilícitos, pena inadecuada para esa finalidad.

3.- ¿En qué consiste el trabajo cotidiano en la especialidad de violencia sobre la mujer?

La labor fundamental, que distingue esta especialidad del resto del trabajo de la Fiscalía, consiste en asistir a la celebración de los juicios rápidos, otras declaraciones y comparecencias que se celebran en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer a diario. El resto del trabajo de los especialistas en esta materia no es  distinto al desempeñado por otros fiscales. Lógicamente, se participa en la instrucción y calificación de las causas, se asiste a los juicios de la especialidad y en la ejecución. Nada sustancialmente diferente a la labor de otros fiscales.

Pero puedo asegurar que asistir a todas las declaraciones, todos los días, supone un enorme desgaste personal y mental. Muchos son casos que conllevan una importante carga emocional que entraña que los “fiscales especialistas” se lleven el problema a casa, lo que, raramente, sucede con otros ilícitos. Es, por otro lado, una materia que tiene un componente de inseguridad a la hora de tomar decisiones, que contribuye de forma importante a ese desgaste personal. Qué decir cuando hay menores, la sensación descrita se incrementa exponencialmente. Decisiones que son para ya, muchas veces, sin posibilidad de reflexión, debido a la carga diaria de trabajo. Oír, valorar y decidir requiere tiempo y a veces no lo hay.

Echo a faltar la valoración de este esfuerzo que realizan los compañeros/as en esta materia.

4.- ¿Hay algún patrón común en las victimas y los agresores en el ámbito de tu Comunidad, en comparación con el resto de España?

La respuesta tiene que ser negativa, ni las víctimas, ni los agresores presentan unas características que los distingan del resto de España. La violencia se produce sin distinción de grupos sociales. Es cierto que se dan en determinados casos factores o la presencia de rasgos comunes, generalmente adicciones, enfermedades mentales, pero no son, por sí mismas, determinantes de la violencia, ésta se produce al margen de ellas.

5.- ¿Cómo crees que mejoraría la atención a las víctimas?

Solo se puede lograr a través de las pretensiones previstas en la ley: el tratamiento integral y la especialización. Es preciso, entiendo, acudir a la idea antes señalada, que los profesionales que intervienen puedan atender a la mujer en un mismo lugar, evitándole peregrinar por sucesivas dependencias. Escalonar esa intervención comenzando por un refuerzo psicológico a la mujer y a los menores para prepararlos y explicarles lo que se le viene encima y una asistencia letrada adecuada. Después de esto la intervención policial y judicial. Y de ser preciso el tratamiento terapéutico. Es primordial explicar con detalle en qué va a consistir el proceso judicial, la importancia decisiva de su participación activa, sin engaños, haciéndole saber que va a tener un coste personal y emocional pero que tendrá la ayuda precisa y que es la única manera de salir de esa situación.

6.- De los casos que ha llevado en el ejercicio de esta especialidad ¿hay alguno en concreto que quieras destacar?

Sin duda dos, la muerte de dos menores como “castigo” a la madre. Me interesa incidir en el segundo pues supuso un cambio en la forma de tratar estos  supuestos. El asesinato del niño se cometió en el año 2017 y la cuestión que se planteó en ese primer momento fue si competía la instrucción de la causa al Juzgado de Violencia sobre la Mujer o al Juzgado de Instrucción, pues el hecho era ese aisladamente. No había otra acción directa sobre la mujer. La muerte en sí parecía inexplicable fuere del contexto de que se cometiese para infligir un daño insoportable a la mujer, haciéndole daño en lo que más quería, castigándola por no haber accedido a reanudar la relación y atreverse a tener otra pareja. La causa la instruyó el Juzgado de Violencia sobre la Mujer y tras la brillante labor de una compañera de la Sección se condenó por un delito de asesinato y otro del artículo 173 en el entendimiento de que el asesinato fue el medio para ocasionar la lesión psíquica a la madre. Posteriormente, se recogió una conclusión en las Conclusiones de los Fiscales Delegados en Violencia sobre la Mujer del año 2017 basada en este supuesto.

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EVARISTO ANTELO BERNARDEZ. Fiscal delegado en Zamora

1.- Desde que inició tu recorrido como Fiscal Especialistas delegado contra la Violencia de Género, ¿qué es lo que más te ha llamado la atención de esta problemática?

El que no haya un estereotipo de maltratador ni tampoco de mujer víctima ni en la edad pues la hay muy jóvenes y otras de mucha más edad y que también pertenecen a muy diferentes ámbitos sociales; no sólo a los marginales sino también a ambientes ya mucho más formados y cultos y lo mismo ocurre entre los hombres autores de los delitos de violencia.

También se hace necesario destacar, y esto lo siente este Fiscal, que existe un alto porcentaje de víctimas que, tras denunciar en la policía, durante la instrucción de la causa no quieren seguir adelante con el procedimiento o bien se acogen ya en la vista oral o su derecho a no declarar con las inherentes consecuencias de sentencias absolutorias, circunstancia que se lamenta.

2.- ¿Qué valoración haces al analizar estos delitos ante un problema que sufren las mujeres por parte de algunos hombres?

Pienso que todavía falta ahondar en una adecuada educación en los valores de la absoluta igualdad entre hombre y mujer en el total respeto hacia éstas y en conseguir convencerlas que nunca son las responsables de lo que hayan sufrido, que ninguna culpa tienen y por eso pedirles e incluso suplicarles que denuncien y que sigan con tal denuncia hasta el final de la causa.

3.- ¿En qué consiste el trabajo cotidiano en la especialidad de violencia sobre la mujer?

Estar presente en todas las declaraciones de las víctimas, así como de los investigados para de tal manera y desde un primer momento tener pleno conocimiento de los hechos denunciados y de los pormenores de los mismos pues también asisto a la práctica totalidad de las pruebas testificales lo cual sin duda redunda en una mejor y más acertada calificación de los hechos.

4.- ¿Hay algún patrón común en las victimas y los agresores en el ámbito de tu Comunidad, en comparación con el resto de España?

Viene casi contestada en la primera pregunta, y por lo tanto un patrón común no existe excepto tal vez en que, en la gran mayoría de los casos, más del 75%, tanto la víctima como el maltratador son españoles pudiendo también anotarse y ello llama poderosamente la atención que muchas chicas jóvenes aceptan como algo normal un comportamiento marcadamente machista de los hombres y de ahí aquella adecuada educación a que nos referimos en la respuesta segunda.

5.- ¿Cómo crees que mejoraría la atención a las víctimas?

Desde el punto de vista jurídico tal vez resultaría positivo para las víctimas evitar la repetición de declaraciones y por lo tanto cabria estimular la realización de pruebas preconstituidas.

6.- De los casos que ha llevado en el ejercicio de esta especialidad ¿hay alguno en concreto que quieras destacar?

Al margen de los delitos más comunes, afortunadamente no muy graves en esta provincia de maltrato ocasional, amenazas y coacciones, se está produciendo un indeseable repunte de abusos sexuales y lo que es más grave aún de agresiones sexuales o violaciones, que penológicamente por este fiscal, siempre tienen la respuesta más rígida e inflexible posible dentro, como es lógico, del sometimiento al principio de legalidad.