5.3 La seguridad vial y la movilidad sostenible: funciones del Ministerio Fiscal
En las resoluciones de las instituciones de la UE se pondera la íntima relación entre la movilidad y la seguridad vial, consideradas como dos perspectivas de las ciudades del futuro por las que se trabaja. Así se observa en los Considerandos de la Resolución del Parlamento Europeo de 2 de diciembre de 2015, sobre movilidad urbana sostenible.
El hilo argumental que las une es que no cabe la nueva movilidad sin el respeto a las normas de la legislación vial que contribuyen a la seguridad de las ciudades. El concepto cultural en los textos europeos que los Fiscales Delegados van a manejar es el de las ciudades del bienestar, la protección del medio ambiente, la convivencia tolerante entre todos sus habitantes, grupos y culturas, y el progreso económico, social y cultural.
Esta visión es la que incorpora, entre otros, el Libro Verde Hacia una nueva cultura de la movilidad urbana (COM.2007.0551) de 25 de septiembre de 2007, la Comunicación de la Comisión de 30 de septiembre de 2009 denominada Plan de acción de movilidad urbana (COM.2009.0490), los trabajos de la Plataforma Europea de Planes de Movilidad Urbana Sostenible, así como la Resolución del Parlamento Europeo de 13 de septiembre de 2018 Sobre Europa en Movimiento: una agenda para el futuro de la movilidad en la Unión y la ya mencionada de 2015.
Todo ello se ha traducido en la elaboración de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), como recomienda e impulsa la UE, no sólo para las ciudades sino también para los pueblos y, en particular, para las zonas rurales alejadas a fin de evitar su despoblación, adecuado a su singularidad cultural, económico-social, geográfica y climática, que comprende entre otras medidas: a) La planificación urbanística de la utilización del suelo, realizada en el contexto y con estudios previos de movilidad. b) La planificación global y coordinada de todas las formas de movilidad bajo la premisa de la paulatina reducción de la contaminación sonora y medio ambiental derivada de los vehículos de motor con combustibles que la generan. c) El fomento de los sistemas de transporte inteligente (STI) y de la idea de circulación conectada, con especialísima prioridad como alternativa de la utilización de la bicicleta y, en particular, la promoción del caminar por las ciudades y la peatonalización. d) La atención específica a las personas con movilidad reducida y/o de edad avanzada, el diseño de infraestructuras sin barreras y la generación de formas de movilidad accesibles para ellos, en concreto el transporte puerta a puerta.
A lo largo de 2018 se han sentado las bases para que, a partir del año próximo, la especialidad trabaje con un nuevo y trascendente enfoque que tenga en especial consideración las citadas medidas, ampliando para ello los cometidos de los Fiscales Delegados con esta nueva perspectiva en el desempeño de sus funciones.